17.2.05

Sobre el Nesquik, el Cola-Cao y la entropía

INTRODUCCIÓN INTRODUCTORIA

En primer lugar, debo expresar todos mis respetos para con los consumidores de Cola-Cao. Tiene muy buen sabor, es muy saludable, y todo eso. Durante esta memoria no se ha maltratado a ningún Cola-Cao.

He elegido Nesquik como principal protagonista porque es el que he venido consumiendo desde que tan sólo era una larva, pero quiero dejar claro que, a efectos prácticos de la memoria, se puede substituir la marca Nesquik por Cola-Cao Turbo sin ningún problema. Pero cuidado: sólo por Cola-Cao Turbo, y en ningún caso por el Cola-Cao normal.

Pasemos, pues, al tema que nos ocupa: La entropía vista desde el Universo de la leche con cacao en polvo.*

Supongamos que tenemos dos vasos de cristal, de tamaño mediano (250 ml, el que solemos usar cotidianamente para beber). Es muy importante que los vasos sean de cristal, y no de plástico (de los que solemos usar para que los niños no nos destrocen los de cristal que solemos usar cotidianamente para beber). La razón de esta aparente trivialidad radica en que, durante el desarrollo de la práctica (en caso de hacerla; sale más rápido y barato el arte de imaginar) necesitaremos observar las distintas estructuras que adquirirán las partículas en suspensión coloidal del Nesquik (o Cola-Cao Turbo) y del Cola-Cao a través de los vasos.

Prosigamos. Ahora necesitaremos un paquete de leche de un litro. La marca de la leche es indiferente para la prueba, aunque por las mismas razones que explicaba para la elección del Nesquik en detrimento del Cola-Cao Turbo, utilizaré leche semidesnatada U.H.T Calcio 1600 mg con vitamina A+D+E+Ácido Fólico de la marca HACENDADO.

En realidad, tendremos suficiente con medio litro (dos vasos de leche => 250+250 = 500 ml = 1/2 l). A menos que se especifique lo contrario, los experimentos se realizarán con la leche a temperatura ambiente (unos 22º tal día como hoy).

Vamos a llenar los dos vasos con leche, hasta un nivel aproximado que consiga un dedo de distancia con el borde superior. El motivo es obvio: si lo llenamos del todo, al añadir el Nesquik o Cola-Cao Turbo, y el Cola-Cao, puede rebosar, causando el estropicio del mantel de la mesa de la cocina, y la hipertensión con los consiguientes gritos del ama de casa correspondiente. Para evitar todo esto, recordemos: Rellenar los vasos hasta que quede un dedo por arriba.

El siguiente paso es, con mucho, el más delicado de la prueba; de su feliz desenlace dependerá que el desarrollo posterior concluya con éxito o no. De forma que hay que prestar mucha atención.

Con una cucharilla pequeña -de las que usamos para remover el café, tomar yogur, o mover el cacao en polvo disuelto en la leche- vamos a añadir lentamente CINCO cucharadas llenas hasta arriba de Nesquik en el vaso que llamaremos a partir de ahora Vaso nº 1 -con Nesquik-. El porqué de que sean CINCO y no tres, como se suele hacer usualmente, es debido a que soy algo goloso y me encanta el regustito dulzón que se queda después en la boca. Con tres, no resulta.

En este punto, veamos cómo se comporta el Nesquik al tomar su primer contacto con la leche: Una gran parte cae hacia el fondo (por su propio peso, y por tener el cacao en polvo mayor densidad que la leche), tiñendo ligeramente el líquido a su paso, y depositándose al estilo de un berrocal de piedras en el culo -con perdón- del Vaso nº 1 -con Nesquik-. Si el Nesquik estaba algo apelmazado, o si el contacto con la leche ha sido brusco, observaremos que se producen algunos grumos en la superfície.**

Bien, detengámonos en este mismo instante. No hay que remover el Vaso nº 1 -con Nesquik-. Repito, NO HAY QUE REMOVER EL VASO Nº 1 -CON NESQUIK- TODAVÍA. Quien lo haya hecho, deberá comenzar desde el principio y prestar más atención.

Observemos la disposición entrópica que tiene en este preciso momento la disolución leche-cacao_en_polvo: Una zona máxima de probabilidad en el fondo del Vaso nº 1 -con Nesquik-, de un color marrón oscuro; una zona degradada con una rampa de colores que va del marrón oscuro al blanco lechoso algo achocolatado; una zona con posibles grumos con un color marrón visiblemente superior al de su escalón inferior.

Obviando esta zona de grumos que puede chocar a la vista por no guardar relación aparente con el resto del degradado -y cuya explicación es sencillamente que la tensión superficial de la leche impide a algunas partículas de cacao en polvo atravesar su capa exterior y profundizar en ella- nos centraremos en la disposición de las capas de Nesquik (recordemos que el Cola-Cao Turbo debería tener el mismo efecto) que han quedado "impresas" con un mapa de colores. Éste mapa de colores delata, no sólo la profundidad que han tomado las partículas, sino también la heterogénea disolución que ha hecho presencia en el líquido.

El análisis entrópico de la situación es el siguiente: A pesar de que en teoría debería haber una presencia equiprobable de partículas de cacao en polvo en todo el líquido, por razones físicas nos ha quedado un "orden desordenado" que a más de uno podría traerle a la memoria la disposición ordenada de los ejércitos nazis.***

¿Es esto aleatorio? La respuesta es un rotundo NO. Las leyes de la física no permiten la aleatoriedad total que buscamos. En cualquier caso, sería una disposición pseudoaleatoria. Para llegar a la aleatoriedad real, y a la máxima entropía del sistema, procederemos (ahora sí) a remover la leche con la cucharilla. Nuestro aporte de energía cinética al sistema creará un caos a una pequeña escala (localizada en el interior del Vaso nº 1 -con Nesquik-) del fenómeno gravitacional que, al verse neutralizado por fuerzas exteriores, nos permitirá percibir el factor máximo de entropía del vaso de leche con Nesquik.

Como sabemos, entropía es igual a desorden, pero éste no está reñido forzosamente con una cierta apariencia ordenada a escalas mayores; esto es, que aunque a escala microscópica todas y cada una de nuestras partículas de cacao en polvo estén rebotando las unas contra las otras en el interior del cristalino recipiente, a nivel macroscópico se obtiene un estado homogéneo de una tonalidad (muy apetecible, por cierto) achocolatada.

Deducimos, pues, que el Nesquik muestra su máximo estado de entropía en su fase de disolución perfecta (la energía que normalmente se usa para obtener el orden a partir del caos, se usa ahora para obtener el caos a partir del orden físico).

Hasta aquí los experimentos con el Nesquik (o Cola-Cao Turbo, si se prefiere). Ahora volvamos la vista hacia el otro vaso, que a partir de ahora llamaremos Vaso nº 2 -con Cola-Cao-, aquél al que todavía no le hemos añadido el cacao en polvo.

Como cinco cucharadas de Cola-Cao serían excesivas (cuesta horrores disolver bien tres; cinco es una tarea para Ethan Hunt****), procederemos a echar únicamente tres. El motivo de que el Cola-Cao sea tan jodidamente -con perdón- indisoluble, lo desconozco. En mi opinión, ha sido un gran acierto la producción de Cola-Cao Turbo.

Como ya conocemos el procedimiento, seré más escueto. Observamos rápidamente que la mayor parte del cacao en polvo se queda en la superfície, y algunos en grumos que permanecerán incluso suspendidos en el interior del líquido.*****

En cualquier caso, no observaremos la misma rampa de degradado que teníamos con el Nesquik, sino que más bien al contrario, tendremos una rampa invertida con tonos que irán esclareciéndose a medida que profundizamos en éste Vaso nº 2 -con Cola-Cao-.

Tal vez este dato ya sea síntoma del hecho que pretendemos desvelar, pero no me pagan lo suficiente como para profundizar en él, de forma que sigamos adelante.

Removemos el Vaso nº 2 -con Cola-Cao- con la cucharilla, tal y como hicimos con el Vaso nº 1 -con Nesquik-. Apreciamos también que la dispersión se vuelve más coloidal, en gránulos más finos y uniformes, aunque no desaparecen los grumos. Para hacer desaparecer efectivamente estos grumos, deberíamos proporcionarle una mayor energía al sistema; no sólo cinética mediante el movimiento de la cucharilla, sino aumentando la temperatura del conjunto (por ejemplo, con el microondas, a un minuto y medio de tiempo y 375º).

Sin embargo, para el hecho que pretendemos desvelar, la mayor entropía del Nesquik con respecto al Cola-Cao, debemos considerar ambos recipientes y líquidos a la misma temperatura. Detengámonos por un momento -si hay algún policía en la sala, haga el favor de no tomárselo literalmente- y pensemos en qué son los grumos: los grumos no son más que información redundante, sucesos con mayor probabilidad que el resto.

Esto causa, en última instancia, que se pueda comprimir más (o que ya estuviera más compacto al principio) una cucharada de Cola-Cao que una de Nesquik, por ser aquélla más redundante, y esta última más equiprobable.

La conclusión tras todo este experimento, es clara a todas luces: el Nesquik presenta una estructura con mayor propensión a desprender energía (aumentando la entropía del conjunto) que el Cola-Cao, que presenta una estructura cuya energía se emplea en la cohesión intermolecular. ¿Acaso es esto sinónimo de que el Cola-Cao tiene mayor calidad que el Nesquik? No lo sé. Únicamente me han pedido que haga una memoria sobre el Nesquik, el Cola-Cao, y la entropía. Es lo que he hecho. Y ahora, con el permiso de ustedes, me voy a tomar un café con leche.******

NOTAS:

* Para saber más sobre dicho Universo, se recomienda leer este apasionante documento: La historia del pueblo dok-nuh

** El caso de echar la leche sobre el cacao en polvo no está recogido.

*** El estudioso Antonio Manuel Guerrero ha especulado -a raíz de los nuevos datos sobre la probable homosexualidad de Adolf Hitler- que su tendencia sexual fue el motivo de que buscara un mundo ideal lleno de rubios altos, fuertes, y con ojos azules.

**** Ethan Hunt: Nombre del protagonista de la mítica serie "Mission: Impossible".

***** Supongo -no lo he podido comprobar empíricamente- que la razón para esto se encuentra en el volumen del grumo: por el principio de Arquímedes, el desplazamiento de volumen de líquido que fuerza el grumo es igual al empuje que recibe en sentido ascendente, alcanzando un par de fuerzas entre el cual queda suspendido.

****** El café con leche pertenece a otro grupo entrópico cuyo estudio no entra en mi modalidad. Estáis enfermos.

7 comentarios:

Mars Attacks dijo...

Bien, parece que por fin el blog se ha recuperado del colapso que le dio hace unos días y me ha dejado acabar de poner algo que recordé en la cena friki del viernes pasado. Es un trabajito que hice para Seguridad y Protección de la Información, cuatro años ha. Espero que os guste ;)

Daniel Ripollés dijo...

Estás enfermo. Y me encanta :D

Anónimo dijo...

Jajajaja ingenioso!

P.D. Yo tb soy de Nesquick!

Anónimo dijo...

...pues a mí me gustan los grumitos... :-/

Mars Attacks dijo...

He de decir que desde que escribí el texto hasta la fecha le he dado alguna oportunidad al Cola-Cao y, efectivamente, masticar los grumitos está muy rico. Pero sólo por el tiempo muerto que supone terminar de disolver el cacao en el vaso, me resulta tedioso. Cuatro años después, sigo con mis tres cucharadas (soperas y hasta arriba) de Nesquik...

Anónimo dijo...

Alguien se acuerda del ColaCao VIT? Nada que ver con el ColaCao Turbo ese, que está "ajqueroso". Era el ColaCao de los elegidos: sabía mejor y se disolvía rápido. Desde su triste desaparición soy seguidor del conejo de Nesquik.

PD: Emilio, estoy esperando una reedición del cursillo de Blender, pero "para torpes". Sigo atrancado con lo de los materiales... y lo de animar, ni lo he intentado!

Mars Attacks dijo...

Bueno, en la iparty de Aditel (que este año parece que va a ser para septiembre) seguramente nos marcaremos un taller (algo más escueto) donde explicaremos de nuevo y por encima las características más relevantes del programa. En cualquier caso, si me pillas por ahí, siempre estoy abierto a hacer alguna explicación (a menos que vaya con muchas prisas o muy ajetreado, que últimamente suele ser todo el tiempo :S).

Cola-Cao Vit... a saber qué guarrerías llevaría eso. Aceite de colza, lo menos :-/