Cuando estés en la cama, busca con la vista alguna luz ténue (algo así como un led lejano, cosas fosforescentes que tengas por la habitación, algún despertador que esté lejos, etc.).
Ahora cierra fuerte uno de los dos ojos, y coge tu móvil o algún dispositivo que emita bastante luz, y míralo fijamente durante medio minuto con el ojo que tengas abierto.
Desconecta esa luz (o espera a que se apague), y vuelve a mirar el punto de luz ténue con la vista. Vuelve a jugar a alternar el ojo con el que lo miras. Incómodo, ¿verdad? Es lo que tiene jugar con el control del brillo del ojo :)
Esta sensación es muy duradera, aunque puedes revertirla fácilmente abriendo la luz del cuarto (para quedarte "ciego" de los dos ojos y que tus pupilas tengan la misma apertura).
Ahora cierra fuerte uno de los dos ojos, y coge tu móvil o algún dispositivo que emita bastante luz, y míralo fijamente durante medio minuto con el ojo que tengas abierto.
Desconecta esa luz (o espera a que se apague), y vuelve a mirar el punto de luz ténue con la vista. Vuelve a jugar a alternar el ojo con el que lo miras. Incómodo, ¿verdad? Es lo que tiene jugar con el control del brillo del ojo :)
Esta sensación es muy duradera, aunque puedes revertirla fácilmente abriendo la luz del cuarto (para quedarte "ciego" de los dos ojos y que tus pupilas tengan la misma apertura).
2 comentarios:
Jajajajajajajaja... qué demente... ¬¬
Demente y deojo.
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