16.6.05

La pregunta

El paseo había sido largo. Las noches de verano eran muy refrescantes en aquella carretera que salía del pueblo adentrándose en la montaña.
En mitad de ninguna parte, muy lejos de la suciedad ambiental de la ciudad, la oscuridad era casi total. Las estrellas se mostraban sobre ellos tal y como lo llevaban haciendo miles de años antes, y sólo la luna tutelaba sus caras serias, de pie y en silencio entre la vegetación del camino.
Él la miraba. La conversación había sido dura, muy dura. Suspiró.
-¿Qué voy a hacer contigo?
Ella respondió a la pregunta con una lágrima. No tenía otra respuesta, sólo una versión de la misma pregunta. Su versión.
Qué voy a hacer sin ti...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ella todavía fumaba. Él todavía bebía.

Era Nochevieja... no, mentira, ya era Año Nuevo, por supuesto. Ella, no sabía por qué, empezó a llorar; igual porque el maldito año se acababa de una vez y la promesa del año nuevo parecía traer algo de ilusión... esa frágil ilusión de que algo nuevo comienza, de que igual se podía intentar...

"¿Adónde vas?"

... y el muy imbécil le dijo "...a Carteles, a seguir la ronda ¿no?"

Anónimo dijo...

:_)