Desde ayer hay una lluvia de estrellas, las Leónidas. Me gustan especialmente porque coinciden con mi cumpleaños, y es una especie de regalo cósmico (siempre que el cielo lo permita). Normalmente "sueño" con disfrutar de alguno de esos cumpleaños tumbado en una hamaca en la playa con mi hipotética pareja, bien tapaditos, eso sí. Es un pensamiento muy relajante.
Esta noche hacía mucho frío. El cielo estaba insultantemente despejado, hasta el punto de que he podido ver por primera vez una nebulosa en una zona cercana a Orión. Ha sido bonito, aunque de nuevo, disfrutar solo de estos espectáculos le deja a uno algo melancólico.
Aunque dicen que el cuarto de siglo me favorece. Que estoy más guapo, más listo y hasta más alto si les apuro. Es posible, pero también me siento más solo y más cansado. Al menos, la gente que me rodea es tan fantástica que hace que me olvide de todo un poco cuando estoy entre ellos.
En fin, tengo una camiseta de Epi, una cajeta-smiley llena de chuches, una flamante tableta digitalizadora, y un pequeño dolor de dientes, un sabor de piruleta, el calor de besos y abrazos varios, sonrisas, guiños y buenas caras, y quizá un pequeño cambio de rumbo en las velas del barco de mi vida. Veremos si conducen a Ítaca. En cualquier caso, rezaré para que el viaje sea largo. Lleno de aventuras y de conocimiento. Rezaré para que el viaje sea largo, y que sean muchas las mañanas en las que llegue a puertos que mis ojos ignoraban, y vaya por las ciudades para aprender de los que saben.
P.D.: Pondría el gesto manual que representa los 11001, pero me parece algo grosero. Otra muestra más de que me hago viejo...
Esta noche hacía mucho frío. El cielo estaba insultantemente despejado, hasta el punto de que he podido ver por primera vez una nebulosa en una zona cercana a Orión. Ha sido bonito, aunque de nuevo, disfrutar solo de estos espectáculos le deja a uno algo melancólico.
Aunque dicen que el cuarto de siglo me favorece. Que estoy más guapo, más listo y hasta más alto si les apuro. Es posible, pero también me siento más solo y más cansado. Al menos, la gente que me rodea es tan fantástica que hace que me olvide de todo un poco cuando estoy entre ellos.
En fin, tengo una camiseta de Epi, una cajeta-smiley llena de chuches, una flamante tableta digitalizadora, y un pequeño dolor de dientes, un sabor de piruleta, el calor de besos y abrazos varios, sonrisas, guiños y buenas caras, y quizá un pequeño cambio de rumbo en las velas del barco de mi vida. Veremos si conducen a Ítaca. En cualquier caso, rezaré para que el viaje sea largo. Lleno de aventuras y de conocimiento. Rezaré para que el viaje sea largo, y que sean muchas las mañanas en las que llegue a puertos que mis ojos ignoraban, y vaya por las ciudades para aprender de los que saben.
P.D.: Pondría el gesto manual que representa los 11001, pero me parece algo grosero. Otra muestra más de que me hago viejo...
3 comentarios:
Bueno también tienes con que ducharte y oler bien. Ejem, ejem, existimos más personas que nos hemos acordado de ti ¿o no?
Més lluny, heu d'anar més lluny
dels arbres caiguts que ara us empresonen,
i quan els haureu guanyat
tingueu ben present no aturar-vos.
Més lluny, sempre aneu més lluny,
més lluny de l'avui que ara us encadena.
I quan sereu deslliurats
torneu a començar els nous passos.
Més lluny, sempre molt més lluny,
més lluny del demà que ara ja s'acosta.
I quan creieu que arribeu, sapigueu trobar noves sendes.
Cierto, cierto, he comenzado el nuevo año con un aroma irresistible, que sé que pronto dará sus frutos.
Gracias a las dos :)
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