Sería interesante que para ser político (de cualquier país) se necesitara tener, como mínimo, una carrera de ciencias y otra de letras, y dominar al menos tres idiomas. Que no cobrara absolutamente nada, y sólo se tuviera pagados los gastos de alojamiento (en un piso normal), comida (con una tripa normal) , y educación y sanidad (ambos públicos).
Que tuviera que tener un hijo con una enfermedad rara, y a otro en primera fila de combate del ejército. Y un perro, o un gato. Que su piso normal estuviera cerca de un vertedero, en una ciudad con sequía y sin un solo árbol. Que tuviera que pasar una semana al mes en lugares similares de otras ciudades del planeta. Que tuviera que hacer todos los papeleos por Internet, y conseguir cualquier obra cultural por ese medio. Y que cuando terminara su cargo, tuviera que vivir al menos un año de los donativos de la gente a la que ha estado representando.
Mi wishlist sería un poco más larga, pero con eso me conformaría. Igual con algo así, hasta empezaba a haber confianza en la clase política.
Que tuviera que tener un hijo con una enfermedad rara, y a otro en primera fila de combate del ejército. Y un perro, o un gato. Que su piso normal estuviera cerca de un vertedero, en una ciudad con sequía y sin un solo árbol. Que tuviera que pasar una semana al mes en lugares similares de otras ciudades del planeta. Que tuviera que hacer todos los papeleos por Internet, y conseguir cualquier obra cultural por ese medio. Y que cuando terminara su cargo, tuviera que vivir al menos un año de los donativos de la gente a la que ha estado representando.
Mi wishlist sería un poco más larga, pero con eso me conformaría. Igual con algo así, hasta empezaba a haber confianza en la clase política.
2 comentarios:
Tierra llamando a Emilio... ¿sigue usted vivo?
Ya sabemos que entre tu criadero de gatos, tus ninjas, tus tierras de lobos y recogidas de premios andas algo liadillo pero tienes el blog algo parado. ¿O me lo parece a mí?
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