20.7.06

El canario

—¡Hola, Javi! ¿Qué tal? ¡Cuánto tiempo! Pasa, pasa. Cuidado con la jaula del canario.
—Hola, Merche. Pues nada, estaba de viaje por la zona y he recordado que ahora vivías por aquí, así que he pensado en pasar a salu... esto... oye, ¿qué le pasa al canario?
—¿Cómo que qué le pasa? ¿Te refieres a que no canta? Lleva una temporada muy tímido, será el calor.
—No, no eso... ¿No tiene los comederos a rebosar?
—Bueno, no come mucho. ¿Por qué crees que dicen lo de "comer como un pajarito"?
—Aún así, Merche. ¿No ves que está patas arriba?
—¿Y? Estará durmiendo.
—Me sabe mal decírtelo, pero a mí me parece que está muerto.
—¡Calla, muerto! ¡Ja, ja, ja, qué sabrás tú de animales! Pero pasa, pasa, que te enseñe el resto de la casa.

4 comentarios:

Bridget dijo...

¿patas arriba el canario? ¿No será que tú estás cabeza abajo?

servidora dijo...

Pos me has dejado algo acojonailla. Me he quedado pensando en todas las cosas evidentes que uno se empeña en no ver, pensando que así no las vive, pero que ahí están...

Vamos, que ojos que se empeñan en no ver, corazón que así le luce y no lo siente...

Anónimo dijo...

Es cierto, estos animales se mueren al alba y tarda uno en darse cuenta.
Bromas aparte, yo hace tiempo qeu sustituí al canario por una patata con palillos. No sólo es inmortal, sino que además le salen brotes verdes por todas partes, y se le coge el mismo cariño.
Me he acordado del famoso sketch de los Python. Pinchen, pinchen...
http://www.youtube.com/watch?v=2H6DSoqZz_s&search=dead%20parrot

Mars Attacks dijo...

Juas, qué buenos son. Seguro que si les entendiera algo de lo que dicen, aún me gustarían más.

Servidora ha dado en el clavo (y Bridget también). La historia está basada en un caniche ciego y sordo, que mi madre pretendía que tuviera los ojos azules y estuviera algo despistado. Hizo falta que el pobre chucho se diera de cabeza contra una enorme botella de butano para que empezara a pensar que lo mismo no iba a ser eso.