Lo que tiene que pasar para que comience a creer en la política es relativamente fácil.
Aquellos que ostenten un puesto político y derivados se autoasignarán el salario mínimo interprofesional.
No habrá oposición: los partidos que no resulten los más votados se dedicarán a la propuesta estudiada de mejoras para el lugar. El prestigio de cada partido no vendrá dado por los insultos que profiera al partido en el poder, sino por la calidad y cantidad de sus propuestas.
Tendrán que dejar de perder el tiempo con mutuas acusaciones. Ante un problema, deberán responder con las mejores formas para solucionarlo que se les ocurriera.
El partido ganador podrá disponer a su voluntad de los expertos en la materia de otros partidos, fusionando sin problemas ideas de bandos políticos dispares.
De hecho, tendría que dejar de existir la separación entre partidos; si realmente tienen como meta hacer prosperar un lugar, es incongruente que se vean incompatibles entre sí.
Aún diría más; lo que tiene que pasar para que comience a creer en la política es que dejaran de existir partidos. Que se concienciaran de que lo importante no es la ideología, sino las ideas.
Lo que tiene que pasar para que comience a creer en la política es que desaparezcan todos los aprovechados sedientos de poder y lucro, y tomaran las riendas la gente que realmente quiera tanto a su pueblo que no le importe quién esté a las riendas mientras busque la prosperidad de dicho pueblo.
No parece difícil.
Aquellos que ostenten un puesto político y derivados se autoasignarán el salario mínimo interprofesional.
No habrá oposición: los partidos que no resulten los más votados se dedicarán a la propuesta estudiada de mejoras para el lugar. El prestigio de cada partido no vendrá dado por los insultos que profiera al partido en el poder, sino por la calidad y cantidad de sus propuestas.
Tendrán que dejar de perder el tiempo con mutuas acusaciones. Ante un problema, deberán responder con las mejores formas para solucionarlo que se les ocurriera.
El partido ganador podrá disponer a su voluntad de los expertos en la materia de otros partidos, fusionando sin problemas ideas de bandos políticos dispares.
De hecho, tendría que dejar de existir la separación entre partidos; si realmente tienen como meta hacer prosperar un lugar, es incongruente que se vean incompatibles entre sí.
Aún diría más; lo que tiene que pasar para que comience a creer en la política es que dejaran de existir partidos. Que se concienciaran de que lo importante no es la ideología, sino las ideas.
Lo que tiene que pasar para que comience a creer en la política es que desaparezcan todos los aprovechados sedientos de poder y lucro, y tomaran las riendas la gente que realmente quiera tanto a su pueblo que no le importe quién esté a las riendas mientras busque la prosperidad de dicho pueblo.
No parece difícil.